martes, 1 de febrero de 2011

Baile del Dragón inicia el Año Nuevo chino

La Fiesta de la Primavera, como también se conoce a la bienvenida del nuevo año chino, tuvo su celebración en La Paz en una reunión organizada por la embajada de dicho país. El embajador de la República Popular de China en Bolivia, Shen Zhi Liang, se reunió ayer con sus compatriotas en el Automóvil Club Boliviano (Calacoto) para dar inicio al Año Nuevo chino, su celebración más importante.
El Baile del Dragón, la tradicional cena y el sorteo de regalos son parte de la fiesta que ofreció el embajador Shen para el inicio del festejo, que comienza el primer día del mes lunar y termina el día 15. “El festejo no sólo es para la parte continental, sino también para la parte de ultramar. Es una celebración de muchos años. Aquí en Bolivia celebramos el año del conejo.
Normalmente, todos se reúnen, los familiares regresan para celebrar juntos durante la noche, como en otros países se recibe y se celebra el Año Nuevo”, manifestó. Entre las tradiciones chinas para este evento están: el Baile del Dragón, conservado desde tiempos antiguos, cuyo origen son las artes marciales y sirve para ahuyentar a los malos espíritus.
Otra costumbre es el preparar un sobre rojo con dinero, que por lo general es entregado a los niños y a los más jóvenes, como símbolo de la buena suerte y la salud. Lanzar petardos también es una tradición, sobre todo en los festivales, y es obligatoria para ahuyentar a los demonios.
En la reunión no faltaron los chun lian (escritos) o coplas de la Fiesta de la Primavera o Año Nuevo en China, para diferenciarlo del occidental. Se trata de una especie de carteles con mensajes relacionados con la abundancia, felicidad y prosperidad que acompañan a las familias.
Otro hábito del festejo son los guardianes de las puertas, que son figuras en actitud defensiva, colocadas en las puertas de las casas para defender a los moradores de la posible entrada de Nien (demonio). La comida tradicional es el jiaozi (una especie de ravioles), elaborada sobre todo para la cena de "noche vieja".
Según la embajada, no existe un número exacto de ciudadanos chinos que viven en el país, pero la mayoría se concentra en Santa Cruz, La Paz y Cochabamba.

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